jueves, 18 de junio de 2015

Diario de Aprendizaje PDP 14

Mi diario de aprendizaje
Antes de entrar a hablar de los módulos en sí, me gustaría empezar agradeciendo la labor que han hecho los organizadores de este curso por haberlo hecho posible, pero también a todos los que han participado en él, pues han sido el engranaje necesario para que la interactuación fuese posible.
Creo que los temas han estado estructurados de manera coherente, y con mucha facilidad para seguirlos y aprehender sus contenidos: la estructura podcast + vídeo + artículo + actividades + encuentro permite memorizar e interiorizar lo enseñado. No solo son coherentes en sí mismos, sino que están excelentemente imbricados de manera que lo que aprendimos en el módulo 1 sirve para el módulo 7, y viceversa.
Aunque personalmente no he tenido docencia este año más allá de unas clases particulares, creo que lo aprendido en este curso puede aplicarse al aula en general, y al aula de español en particular.

Módulo 1. Profe experiencial
De entrada, el primer módulo me ayudó a esclarecer una cuestión que yo he padecido como alumno de otras lenguas antes que como profesor: la escasa interacción con la realidad del alumno, tanto externa como interna. Normalmente, el profesor se obsesiona con el uso de la gramática como si fuese la panacea. Pero creo que el aprendizaje comunicativo experiencial acierta al no inclinar la balanza totalmente hacia el otro lado: por supuesto, la información previa es importante, pero sin actividades que impliquen al alumnado y lo conecten con el entorno que lo rodea, las abstracciones que tanto perseguimos serían imposibles.
Como aplicación práctica, destacaría la segunda actividad, que me permitió desarrollar un ejercicio a partir de las palabras de la primera. De esta manera, creo que hemos podido construir todo tipo de actividades que ayuden a implicar al alumno de manera emocional. Finalmente, el único punto que me hizo dudar de este apartado fue la cantidad de alumnos que debían estar presentes en este tipo de aprendizajes, pues al ser tan personal entiendo que quizá no funcione tan bien en grupos numerosos, algo que me confirmó la profesora Analí Fernández-Corbacho.

Módulo 2. Maestro de la imagen
Este es el que probablemente haya sido mi módulo favorito: soy un gran apasionado del cómic, y creo en la utilidad del mismo como herramienta de enseñanza en el aula de español (según la circunstancia, claro). Por tanto, este módulo, enfocado fuertemente en el uso de la imagen es ideal para llevar esto a cabo. Y, en consonancia con lo que digo, las actividades me permitieron poner a prueba en clases particulares un ejercicio muy divertido relacionado con el cómic.
 Por otra parte, creo que pone de relieve lo que señalaba al principio: conecta con el primer módulo, pues es un aprendizaje basado en imágenes, pero al mismo tiempo es experiencial, el alumno se implica totalmente en la actividad.

Módulo 3. Motivador nato
Si algo me ha enseñado este módulo es a calibrar: calibrar los esfuerzos que se hacen, tanto del alumno como del profesor. También me ha enseñado a equilibrar los contenidos y hacia dónde dirigirlo. Como señalan las profesoras Arnold y Fonseca Mora, la dimensión afectiva de la enseñanza no se opone a la cognitiva. No podemos aproximarnos a la enseñanza de lenguas como si fuese algo inmutable y totalmente ajeno al mundo real. De nuevo, encontramos que lo afectivo, lo personal y todo lo relativo a la identidad individual de cada alumno es vital para proporcionarle una buena enseñanza del español. Así que este módulo no hace sino confirmar algo que se viene señalando en los dos módulos anteriores y que es la tónica general del curso (y muy acertada, a mi parecer): Este tipo de enseñanza requiere de grupos pequeños, de forma que nuestra atención al alumno pueda ser mucho más personalizada.

Módulo 4. Culturizador
Si ya había aprendido gracias a los tres módulos anteriores la importancia de lo afectivo, de la identidad y de la aproximación a la personalidad individual de cada alumno, en este módulo aprendí a poner todo en común: ¿Cómo afrontar de manera colectiva lo que nace de manera individual? Para responder esta pregunta, consideré especialmente útil el artículo de José Manuel Foncubierta, donde recoge las preguntas que según Baralo debemos hacernos a la hora de identificar los valores de una cultura.
Destacaría especialmente de este módulo las dos actividades, Una cadeneta cultural para un aprendizaje la mar de intercultural y La cultura material en el proyector, interconectadas entr sí y que permitían exponer aspectos culturales de diversas zonas de manera muy intuitiva.

Módulo 5. Magister Ludi
En 1938, el escritor holandés Johan Huizinga escribía Homo ludens, una obra sobre el importante papel que tiene el juego en el desarrollo social y cultural del hombre. Más de setenta años más tarde, parece que por fin no solo nos damos cuenta, sino que empezamos a incorporarlo en el aula mediante elementos como el flipped learning. De este módulo, he aprendido que en efecto la gamificación en el aula es más real que nunca, que no es nada complicado aplicarla (si se tiene voluntad) y que los beneficios que reporta pueden ser excelentes.
Este tipo de actividades permiten interactuar más si cabe con elementos contextuales, de la vida cotidiana, o poner en práctica conocimientos relacionados con las redes sociales. Lo que personalmente destacaría como más importante es la percepción que crea en el alumno de que la transición del aula al mundo exterior no debe ser una ruptura, sino un continuo, de manera que se cree un flujo en la actividad que permita al estudiante de español percibirla como algo, precisamente, lúdico, desenfadado, pero no por ello menos educativo.

Módulo 6. Mentor Grammaticalis
Y este módulo surge como contrapartida al anterior: no por gamificar hemos de descuidar la gramática. De hecho, tal y como he aprendido gracias a esta parte del curso, la gramática debe explicitarse en algún punto. Creo que este es uno de los errores más comunes que se cometen en la enseñanza de cualquier lengua: o nos preocupamos demasiado por la gramática o la descuidamos, bajo la falsa creencia bien de que la gramática es todo o, por otra parte, de que explicitar la gramática necesariamente conlleva un error. Así pues, la gramática debe abordarse con naturalidad, a la vez que atendiendo a las necesidades personales de cada alumno.

Módulo 7. Facilitador

Finalmente, el módulo 7 pone el broche de oro a este curso, y lo hace de una manera circular: lo que aprendemos en este último módulo puede encadenarse perfectamente a lo que aprendimos en el primer módulo. El curso acaba siguiendo la tónica general: no hay que descuidar al alumno como individuo en pos de la colectividad, ni lo contrario, sino alcanzar un equilibrio, y este curso nos ha ayudado a hacerlo. En el módulo 7 he aprendido que la motivación debe venir del exterior, sí, pero sobre todo debemos ayudar al alumno a interiorizarla.