Mi diario de aprendizaje
Antes de entrar a hablar de los módulos en sí, me
gustaría empezar agradeciendo la labor que han hecho los organizadores de este
curso por haberlo hecho posible, pero también a todos los que han participado
en él, pues han sido el engranaje necesario para que la interactuación fuese
posible.
Creo que los temas han estado estructurados de
manera coherente, y con mucha facilidad para seguirlos y aprehender sus
contenidos: la estructura podcast + vídeo + artículo + actividades + encuentro
permite memorizar e interiorizar lo enseñado. No solo son coherentes en sí
mismos, sino que están excelentemente imbricados de manera que lo que
aprendimos en el módulo 1 sirve para el módulo 7, y viceversa.
Aunque personalmente no he tenido docencia este
año más allá de unas clases particulares, creo que lo aprendido en este curso
puede aplicarse al aula en general, y al aula de español en particular.
Módulo 1. Profe experiencial
De entrada, el primer módulo me ayudó a
esclarecer una cuestión que yo he padecido como alumno de otras lenguas antes
que como profesor: la escasa interacción con la realidad del alumno, tanto
externa como interna. Normalmente, el profesor se obsesiona con el uso de la
gramática como si fuese la panacea. Pero creo que el aprendizaje comunicativo
experiencial acierta al no inclinar la balanza totalmente hacia el otro lado:
por supuesto, la información previa es importante, pero sin actividades que
impliquen al alumnado y lo conecten con el entorno que lo rodea, las
abstracciones que tanto perseguimos serían imposibles.
Como aplicación práctica, destacaría la segunda
actividad, que me permitió desarrollar un ejercicio a partir de las palabras de
la primera. De esta manera, creo que hemos podido construir todo tipo de
actividades que ayuden a implicar al alumno de manera emocional. Finalmente, el
único punto que me hizo dudar de este apartado fue la cantidad de alumnos que
debían estar presentes en este tipo de aprendizajes, pues al ser tan personal
entiendo que quizá no funcione tan bien en grupos numerosos, algo que me
confirmó la profesora Analí Fernández-Corbacho.
Módulo 2. Maestro de la imagen
Este es el que probablemente haya sido mi módulo
favorito: soy un gran apasionado del cómic, y creo en la utilidad del mismo
como herramienta de enseñanza en el aula de español (según la circunstancia,
claro). Por tanto, este módulo, enfocado fuertemente en el uso de la imagen es
ideal para llevar esto a cabo. Y, en consonancia con lo que digo, las
actividades me permitieron poner a prueba en clases particulares un ejercicio
muy divertido relacionado con el cómic.
Por otra
parte, creo que pone de relieve lo que señalaba al principio: conecta con el
primer módulo, pues es un aprendizaje basado en imágenes, pero al mismo tiempo
es experiencial, el alumno se implica totalmente en la actividad.
Módulo 3. Motivador nato
Si algo me ha enseñado este módulo es a calibrar: calibrar
los esfuerzos que se hacen, tanto del alumno como del profesor. También me ha
enseñado a equilibrar los contenidos y hacia dónde dirigirlo. Como señalan las
profesoras Arnold y Fonseca Mora, la dimensión afectiva de la enseñanza no se
opone a la cognitiva. No podemos aproximarnos a la enseñanza de lenguas como si
fuese algo inmutable y totalmente ajeno al mundo real. De nuevo, encontramos
que lo afectivo, lo personal y todo lo relativo a la identidad individual de
cada alumno es vital para proporcionarle una buena enseñanza del español. Así
que este módulo no hace sino confirmar algo que se viene señalando en los dos
módulos anteriores y que es la tónica general del curso (y muy acertada, a mi
parecer): Este tipo de enseñanza requiere de grupos pequeños, de forma que
nuestra atención al alumno pueda ser mucho más personalizada.
Módulo 4. Culturizador
Si ya había aprendido gracias a los tres módulos anteriores
la importancia de lo afectivo, de la identidad y de la aproximación a la
personalidad individual de cada alumno, en este módulo aprendí a poner todo en
común: ¿Cómo afrontar de manera colectiva lo que nace de manera individual? Para
responder esta pregunta, consideré especialmente útil el artículo de José
Manuel Foncubierta, donde recoge las preguntas que según Baralo debemos
hacernos a la hora de identificar los valores de una cultura.
Destacaría especialmente de este módulo las dos actividades, Una cadeneta cultural para un aprendizaje la
mar de intercultural y La cultura
material en el proyector, interconectadas entr sí y que permitían exponer
aspectos culturales de diversas zonas de manera muy intuitiva.
Módulo 5. Magister Ludi
En 1938, el escritor holandés Johan Huizinga
escribía Homo ludens, una obra sobre
el importante papel que tiene el juego en el desarrollo social y cultural del
hombre. Más de setenta años más tarde, parece que por fin no solo nos damos
cuenta, sino que empezamos a incorporarlo en el aula mediante elementos como el flipped learning. De este módulo, he
aprendido que en efecto la gamificación en el aula es más real que nunca, que
no es nada complicado aplicarla (si se tiene voluntad) y que los beneficios que
reporta pueden ser excelentes.
Este tipo de actividades permiten interactuar más
si cabe con elementos contextuales, de la vida cotidiana, o poner en práctica
conocimientos relacionados con las redes sociales. Lo que personalmente
destacaría como más importante es la percepción que crea en el alumno de que la
transición del aula al mundo exterior no debe ser una ruptura, sino un
continuo, de manera que se cree un flujo en la actividad que permita al
estudiante de español percibirla como algo, precisamente, lúdico, desenfadado,
pero no por ello menos educativo.
Módulo 6. Mentor
Grammaticalis
Y este módulo surge como contrapartida al
anterior: no por gamificar hemos de descuidar la gramática. De hecho, tal y
como he aprendido gracias a esta parte del curso, la gramática debe
explicitarse en algún punto. Creo que este es uno de los errores más comunes
que se cometen en la enseñanza de cualquier lengua: o nos preocupamos demasiado
por la gramática o la descuidamos, bajo la falsa creencia bien de que la
gramática es todo o, por otra parte, de que explicitar la gramática
necesariamente conlleva un error. Así pues, la gramática debe abordarse con
naturalidad, a la vez que atendiendo a las necesidades personales de cada
alumno.
Módulo 7. Facilitador
Finalmente, el módulo 7 pone el broche de oro a este curso, y
lo hace de una manera circular: lo que aprendemos en este último módulo puede
encadenarse perfectamente a lo que aprendimos en el primer módulo. El curso
acaba siguiendo la tónica general: no hay que descuidar al alumno como
individuo en pos de la colectividad, ni lo contrario, sino alcanzar un
equilibrio, y este curso nos ha ayudado a hacerlo. En el módulo 7 he aprendido
que la motivación debe venir del exterior, sí, pero sobre todo debemos ayudar
al alumno a interiorizarla.